Instrucciones de Cuidado

Cuidado general de joyas

Con el pasar del tiempo, las joyas finas pueden convertirse en reliquias preciadas para la familia si son cuidadas apropiadamente. El polvo, la contaminación y su uso diario conspiran en conjunto para opacar el brillo de estas piedras preciosas.

Cuidado semanal

Para prevenir la acumulación de jabón, suciedad y polvo, joyas de oro, plata, diamantes y otras piedras de color deben ser limpiadas con agua caliente y jabón suave para platos semanalmente, cepillándolas delicadamente con un cepillo de dientes extra suave, enjuagándolas bien y secándolas con un paño suave y libre de pelusa. Esta técnica no se recomienda emplearla para joyas con piedras orgánicas como ámbar, perlas, jade, lapislázuli, ópalos y turquesa.

Las esmeraldas son las piedras preciosas más delicadas debido a su inclusión y fisuras naturales, por lo que se debe evitar cualquier impacto y variaciones extremas de temperatura. Las esmeraldas no deben entrar en contacto con detergentes, ya que pueden hacerlas perder su color y brillo.

Las perlas son productos orgánicos porosos que se deterioran con facilidad si no son cuidados apropiadamente. Evite su contacto con aceites, sudoración y detergentes. Límpielas cuidadosamente con un paño de tela suave. Las perlas usadas a menudo se deben a hilar una vez al año.

Cuidado anual

Le animamos a que nos traiga sus joyas una vez al año para realizarles un servicio de preservación profesional. Los acabados  brillante, satinado y mate, así como acabados oxidados y la electrodeposición son tratamientos superficiales que podrían desaparecer con el tiempo. Nuestros técnicos expertos conocen todos los aspectos del cuidado de las joyas, incluyendo limpieza, pulido, renovación, encordar las perlas, reparación de cierres y cerradores de pendientes etc…

Almacenamiento de joyas

Siempre almacene sus joyas individualmente en bolsas o cajas para evitar ralladuras y deslustre excesivo. Se debe tomar un cuidado especial para ralentizar el deslustre y la oxidación de las joyas de plata. La limpieza y el pulido frecuente de las joyas de plata preservarán su brillo.

Advertencia sobre los limpiadores ultrasónicos

Es recomendable que la limpieza ultrasónica se deje en manos de joyeros que conozcan sobre los materiales particulares de las gemas y sepan cuándo y cómo usar un limpiador ultrasónico de manera segura.

Los limpiadores ultrasónicos nunca deberían ser usados para limpiar las piedras preciosas con fisuras que hayan sido rellenadas con sustancias como aceite, resina o material acrílico. También, se debe evitar usar materiales de gemas orgánicas tales como perlas, coral, ámbar, jade, lapislázuli, ópalos y turquesa; gemas que han sido recubiertas con una sustancia no permanente como el plástico o la cera; joyas tratadas térmicamente y aquellas que son susceptibles a los cambios de temperatura y al calor, tales como tanzanita, feldespato (la Piedra del Sol y la Piedra de la Luna), fluorita, iolite, kunzita, malaquita, topacio, circón y otros. La vibración generada por la máquina de ultrasonidos puede soltar o astillar las gemas que están con sus soportes.